viernes, 13 de julio de 2012

Habitar

Morar. Orar.

Tomamos el azul y hacemos habitar en él el amarillo, resulta el verde.

Añadimos al 5 el 6, resulta el 11.

Tocamos una nota y manteniéndola tocamos a la vez  otra y obtenemos una tercera.

en mi ser habita Él y resulto un misterio.

Pero en Él habitan tres y el resultado es Dios perfecto.

Tienen que ser tres habitados, tres que moran y resultan sin ser una combinación, ni una suma ni un añadido. Resulta de una habitación eterna de tres que moran.


Me detengo en una parte y así demoro procurando callar y esconder un gozo incomprensible que me abraza mientras a penas alcanzo a escribir sin querer comprender bien lo que gusto, sentado sencillamente como un mendigo a la mesa del ser para siempre.

3 comentarios:

MDR dijo...

Te adoro Dios!!
SL2!!

Miriam dijo...

Un Dios que en su Trinidad nos enseña a Amar y la importnacia del Amor
Un Dios que nos dice que pase lo que pase El nos quiere tanto y con tanta locura, que eso ya tendría que llenar, y rebosar, toda nuestra vida

Theo dijo...

Adoremos al Señor nuestro Dios.Gracias.

Dios que se comunica con su criatura amada.Gracias.

Gracias hermanas por comentar.